Escrito por María Mondragón Ramírez
Estudié la Licenciatura en Administración de Empresas Turísticas y desde que inicié la carrera siempre supe que quería hacer mi tesis sobre museos y crear un puente con otro de mis grandes intereses, el activismo. En ese entonces no lo tenía tan claro como ahora y no dimensionaba lo importante que era analizar la actividad turística desde una crítica más profunda y con mayor amplitud desde una visión más ecológica y más feminista, sobre todo por la relación que tiene con la naturaleza y el entorno cultural.
En el año 2010, ante mi curiosidad y mi interés por dar los pasos que se requieren para el objetivo que me había propuesto, el MUNAL me abrió sus puertas como parte del cuerpo de voluntarios, fue entonces cuando descubrí un universo de posibilidades con la cuales se podrían crear y construir grandes ideas y, a partir de ese momento, me fui involucrando más a profundidad en la actividad museística. Descubrí que los recursos pedagógicos y educativos con que cuentan, además de sus colecciones y variedad de actividades, eran tierra fértil para germinar y replantearnos narrativas que sirvan como cruce entre la sociedad y en este caso el activismo; que a través de una mediación y una curaduría adecuada, pueden hacer tangibles los elementos necesarios para estimular a una consciencia colectiva y caminar hacia nuevos imaginarios y realidades desde la práctica de los museos.
Ante la fuerza y el alcance que ha tenido la cuarta ola feminista, más el incremento y el recrudecimiento de la violencia contra las mujeres, la brutalidad con la que se sobrepasan los límites de los ecosistemas y la imperiosa necesidad sistémica de querer invadir y despojar territorios para seguir produciendo lo insostenible, es que en el 2018 surgió MUSAA (Mujeres por la Sostenibilidad Ambiental y Alimentaria). Se trata de una organización de mujeres como respuesta ante las injusticias y la necesidad de cuestionar, actuar y generar cambios urgentes debido a la preocupante situación de nuestro entorno, nuestra especie y nuestro futuro.
Cuando me invitaron a formar parte de la organización, me di cuenta de que el ecofeminismo es clave para entender la crisis climática actual, por lo que considero es urgente normalizar su teoría y praxis en todos los espacios posibles.
Es así que surgió lo que hoy llamo: Ecos y voces de la naturaleza. Una mirada ecofeminista desde los museos, una propuesta de exposición diseñada en el 2021 como resultado de un camino ya recorrido durante varios años, transitando entre los saberes de los museos y las prácticas culturales y ecológicas, además por supuesto, de los feminismos. Dicha propuesta surgió como resultado de un proyecto final en el seminario de diseño museográfico organizado por la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) en colaboración con el Centro Vlady.
La propuesta de exposición, tiene como objetivo invitar a la comunidad y a los museos a reflexionar sobre la transformación social y acelerar su participación en ello, para tomar nuevas rutas ante las problemáticas ambientales y los conflictos sociales y económicos que nos acontecen. Busca desdibujar la idea de que la labor en torno a las acciones para frenar el cambio climático, el recrudecimiento de la violencia, la intolerancia, las luchas por la justicia social y los derechos humanos, son exclusivas de los movimientos sociales y ecologistas. Propone un enfoque interseccional a partir de diversas teorías, prácticas y movimientos cuyas obras seleccionadas son parte del trabajo de diversos artistas que se han inspirado en temas como los feminismos, la decolonialidad, la crítica al racismo, la perspectiva de género, el emergencia climática, las luchas de los pueblos por la tierra y el territorio, así como su relación con la cultura y las artes.
A raíz del interés mostrado mediante las interesantes críticas realizadas a mi trabajo por las personas que formaron parte del seminario en el 2021, aunado al respaldo de MUSAA, el pasado 12 de mayo, en el marco del Encuentro Universitario Iberoamericano sobre Patrimonio Cultural y Natural, fue seleccionada mi propuesta para formar parte de la serie de ponencias a presentar durante la mesa temática de trabajo llamada “Los Museos: experiencias y perspectivas”.
Formar parte de este proyecto tan valiente y resiliente, rodearme de mujeres inspiradoras, activistas y profesionales de diversas áreas de estudio, así como Diana Morales, una líder con una consciencia y voluntad como pocas, han sido factores que me llevaron a cuestionar mi función como investigadora y como profesional del turismo. Desde luego, también me llevaron a preguntarme desde mi posición y mi papel en la sociedad, cómo puedo contribuir articulando mis saberes, experiencia y creatividad, pero con el respaldo y la confianza de personas con los conocimientos adquiridos en un mundo apasionante y lleno de oportunidades y herramientas para llevarlo a cabo: los museos.
Es por lo anterior que Ecos y voces de la naturaleza es una oferta por escrito y en espera de que algún museo, institución u organismo interesado en el proyecto, pueda y desee desarrollarla e implementarla, para llevar a cabo un ejercicio de diálogo museístico y museográfico, que contribuya en la práctica a promover y normalizar entre los públicos el respeto por la vida, la naturaleza, la diversidad; hacer de la tolerancia, la inclusión, la educación, la participación comunitaria y el trabajo colectivo, algo natural.
Para saber más sobre la expo puedes consultar este PDF del proyecto museográfico. Puedes consultar un poco del Encuentro Universitario Iberoamericano sobre Patrimonio Cultural y Natural aquí.
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